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Injerto óseo para implantes dentales: el porqué de esta opción

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Los implantes dentales son la alternativa más avanzada para recuperar la estética de la risa, además de ser los más saludables, son cómodos y efectivos para solucionar el problema de la pérdida de los dientes.

No obstante, para aplicar a esta técnica en Clínicas JASBAN se realiza un estudio y análisis de la condición del hueso de la mandíbula o del maxilar, para ver si es el adecuado para  instalar el implante y la futura corona.

La reabsorción ósea de esta parte del cuerpo es común principalmente debido a las extracciones de dientes, enfermedades en las encías o por la presencia de tumores.

Este procedimiento consiste en colocar injertos óseos o membranas alrededor de un tejido perdido o con un defecto óseo, esto comúnmente se realiza con el fin de regenerar hueso lesionado.

Para el caso de injertos óseos (hueso) e injertos de tejidos blandos (encía) lo que se busca es mejorar o corregir los defectos de forma, de posición y/o cantidad de encía.

El hueso se puede obtener del mismo paciente extrayendo hueso de otras partes de su cuerpo, o utilizando hueso artificial o de un donante.  Los injertos permiten que el defecto óseo se integre con bajo riesgo de rechazo.

Este proceso dura algunos meses y ayuda a proporcionar una base sólida, para asegurarse de que el implante sea estable y seguro.

Después de obtener los resultados esperados se continua con el resto del procedimiento de los implantes dentales.

¿ Que cuidados tener después de esta cirugía?

  • Tomar los medicamentos formulados para minimizar las posibles molestias que se puedan presentar y para prevenir posibles infecciones
  • En los días de recuperación Jasban recomiendan que el paciente evite fumar, consumir alimentos duros, calientes o ejercer presión sobre la zona intervenida
  • Mantener una buena higiene oral
  • Evitar hacer ejercicio o sobreesfuerzo
  • Asistir a los controles programados

 

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